Lo más importante es querernos y apreciarnos tal y como somos

Cualquier tipo de amor empieza desde dentro Cuánto amamos y apreciamos nuestras acciones y decisiones y, al mismo tiempo, cuánto nos queremos y valoramos a nosotros mismos de cómo nos vemos y aparecemos ante el mundo. Por mucho que se trate del viaje hacia el interior, las apariencias externas también marcan una gran diferencia en el mundo actual. Mucha culpa de ello la tiene la piel sin manchas retocada con Photoshop o los cuerpos esbeltos. Además, las redes sociales no son más que la guinda de un pastel en el que se ridiculizan abiertamente el color y las formas del cuerpo. En estos tiempos deberíamos concentrarnos en promover la positividad corporal. ¿Cómo lo hacemos? Pues sigue leyendo y descubre cómo hacerlo.

Haz afirmaciones positivas.

Esta práctica no sólo ayuda a construir un yo más fuerte, sino también un sistema de amor propio más fuerte. Es una de las prácticas más básicas e inofensivas. Todo lo que tienes que hacer es hablar en voz alta y con frecuencia, especialmente cuando tiendes a empezar a sentirte desagradecido con tu cuerpo. Al principio puede parecer una tontería, pero hazlo de todos modos. No es para que lo vea nadie más, sino para ti. Ponte delante del espejo y sigue haciéndolo. También puedes pegar algún post-it con notas positivas como “Soy suficiente”, “Quiero a mi cuerpo y a mí misma” y “Eres guapa”.

Darte ánimos verbalmente es cien veces mejor que esperar a escucharlos de alguien.

Aceptar cumplidos no hace daño.

Por supuesto, hay días en los que estás más guapa o guapo; eso es porque has hecho un esfuerzo extra para estarlo. Pero cuando alguien se acerca con un cumplido, tendemos a sentirnos incómodos. Puede que no nos veamos lo suficientemente bien con el cuerpo que nos ayuda a movernos y divertirnos, pero los demás no nos ven así y cuando no aceptamos un cumplido, enseguida nos menospreciamos.

Mejor pensar más sano y no más flaco

Cuando miramos a nuestro alrededor y sólo vemos tallas cero y vestidos en los que no cabemos, se crea una espiral de odio hacia uno mismo que, a la larga, nos lleva a buscar formas de reducir la grasa de la dieta y a perjudicarnos de otras maneras. En lugar de eso, empieza por pensar en comer de forma más sana e inteligente.

Y lo que es más importante, date el gusto de rodearte de gente que te aprecie tal y como eres, fomentando y promoviendo el uso positivo de las redes sociales.