La aparición de grietas en los talones, especialmente durante el invierno, es una afección común que afecta a personas de todas las edades.

Debido a la falta de glándulas sebáceas, los pies se resecan con mucha facilidad. En invierno, esta condición empeora mucho, y por razones obvias. También puede producirse por otros motivos, como deshidratación, obesidad, diabetes, eczema, infección por hongos y otros. Sea cual sea la razón, lo importante es tratarlas cuanto antes. Así que, en este artículo, vamos a discutir algunas cremas caseras que puede utilizar para este propósito.

Utiliza plátano y miel para conseguir unos pies suaves e hidratados

El plátano es ampliamente conocido por sus beneficios para la piel. Es un emoliente natural y está cargado de varias propiedades que alivian tus talones significativamente. La miel es una rica fuente de propiedades humectantes que suavizan tu talón. Primero, prepara una pasta espesa con media taza de plátano machacado y 2 cucharaditas de miel orgánica cruda. Aplícate la mezcla en los talones, déjala reposar durante 30 minutos y luego lávate con agua tibia.

Leche, miel y naranja para retener la hidratación

La leche contiene abundantes nutrientes que ayudan a reconstruir la piel. La miel, como ya hemos mencionado, restaura la hidratación de la piel de tus talones. Por otro lado, la naranja es una excelente fuente de vitamina C que ayuda a la producción de colágeno, vital para tu piel. Primero, mezcla 2 cucharaditas de leche con 4 cucharaditas de miel orgánica cruda. Calienta la mezcla a fuego lento y, a continuación, añádele 1 taza de zumo de naranja recién exprimido. Retírala después de un par de minutos y deja que se ponga a temperatura ambiente. Aplícate la mezcla en los talones, déjala actuar unos 45 minutos y retírala con agua tibia.

Utiliza cera de abejas, manteca de karité, aceite de almendras, aceite esencial de árbol de té y aceite esencial de limón para una nutrición extra

La cera de abejas forma una barrera protectora que protege el talón de los invasores. La manteca de karité hidrata la piel seca y también ayuda a la producción de colágeno. El aceite de almendras retiene la humedad, aclara las cicatrices y ayuda a revertir los daños causados por el sol. El aceite de árbol de té es rico en propiedades antifúngicas, antisépticas y antiinflamatorias que calman la irritación de la piel. Además, el aceite esencial de limón exfolia suavemente las células muertas de la piel de tus talones y la hace brillar. Primero, derrite 1 cucharadita de cera de abeja, 3 cucharaditas de manteca de karité y 2 cucharaditas de aceite de almendras a fuego lento. Deja que se enfríe durante un par de minutos y, a continuación, añade 2 cucharaditas de aceite esencial de árbol de té y 2 de aceite esencial de limón. Aplícate la mezcla en los talones, déjala actuar 30 minutos y retírala con agua tibia.

Utiliza cualquiera de las cremas mencionadas cada dos días para obtener mejores resultados.